El impago de facturas es una situación común que afecta a empresas y autónomos, poniendo en riesgo su liquidez y estabilidad financiera. Cuando los métodos amistosos para reclamar el pago no funcionan, una de las opciones más efectivas es presentar una demanda por impago de facturas. Este proceso legal permite a las empresas recuperar las cantidades adeudadas y salvaguardar sus intereses económicos.
En este artículo de DCL Gestión, expertos en recobro de deudas, te explicamos detalladamente cómo presentar una demanda por impago de facturas, los pasos que debes seguir y las claves para llevar a cabo el proceso de manera exitosa. Sigue leyendo para saber más.
¿Cuándo presentar una demanda por impago de facturas?
El impago de facturas puede afectar gravemente a la tesorería de una empresa. Sin embargo, antes de presentar una demanda impago facturas, es recomendable realizar una reclamación extrajudicial, que implica ponerse en contacto con el deudor para intentar resolver el conflicto sin acudir a los tribunales.
Si tras varios intentos no se consigue el pago, será el momento de valorar la presentación de una demanda. Lo más común es que el plazo de prescripción para presentar una demanda por impago de facturas sea de cinco años, aunque este puede variar dependiendo de la naturaleza del contrato o de la relación comercial.
Contar con la asesoría de expertos en recobro de deudas, como los profesionales de DCL Gestión, es clave para asegurar que todos los pasos se sigan correctamente y que el proceso sea lo más eficiente posible.
Requisitos para presentar una demanda impago facturas
A la hora de presentar una demanda por impago de facturas, es fundamental cumplir con ciertos requisitos legales que garanticen el éxito de la reclamación. A continuación, detallamos los principales aspectos que debes tener en cuenta:
1. Factura impagada y documentación de respaldo
El primer paso es contar con la factura impagada, correctamente emitida y que cumpla con todas las formalidades legales. La factura debe reflejar claramente los productos o servicios prestados, los plazos de pago acordados y los datos completos de ambas partes (empresa y deudor).
Además de la factura, es esencial disponer de toda la documentación contractual que respalde la relación comercial con el deudor, como contratos, correos electrónicos, presupuestos aceptados o albaranes de entrega. Cuanta más documentación se tenga, más sólida será la reclamación.
2. Reclamación extrajudicial
Una de las fases previas a la presentación de la demanda es intentar una reclamación extrajudicial. En este punto, se envía una carta formal al deudor solicitando el pago de la deuda en un plazo determinado. La empresa de recobro de deudas, como DCL Gestión, puede encargarse de esta gestión y tratar de alcanzar un acuerdo con el deudor antes de acudir a los tribunales.
3. Plazo de prescripción de la deuda
Como mencionamos anteriormente, es crucial tener en cuenta el plazo de prescripción de las deudas. Dependiendo del tipo de contrato y la naturaleza de la relación comercial, este plazo puede variar, por lo que es importante actuar con rapidez para no perder el derecho a reclamar judicialmente.
Tipos de demandas por impago de facturas
Existen diferentes tipos de demandas para reclamar impagos en función del importe de la deuda y de la situación particular del caso. A continuación, analizamos las más comunes:
1. Proceso monitorio
El proceso monitorio es el procedimiento más rápido y sencillo para reclamar impagos de facturas. Se utiliza cuando la deuda es líquida, exigible y no disputada por el deudor, lo que significa que el deudor no niega la existencia de la deuda, pero simplemente no ha realizado el pago.
Para iniciar un proceso monitorio, basta con presentar la factura impagada y cualquier documento que acredite la relación comercial. Si el deudor no responde en un plazo de 20 días hábiles, el juez emitirá una orden de pago a favor del demandante. Este tipo de proceso es ideal cuando se trata de deudas pequeñas o medianas.
2. Juicio verbal
El juicio verbal es el procedimiento adecuado para reclamaciones de deudas que no superen los 6.000 euros y en las que existan disputas o desacuerdos entre las partes. Para este tipo de demanda, es necesario redactar una demanda formal explicando las causas del impago y presentando todas las pruebas necesarias, como la factura, los contratos y la correspondencia con el deudor.
3. Juicio ordinario
El juicio ordinario se utiliza para reclamaciones de deudas que superen los 6.000 euros o en situaciones más complejas, donde existan desacuerdos importantes entre las partes. Este proceso judicial es más largo y costoso que los anteriores, pero es necesario cuando se trata de cantidades elevadas o casos de mayor complejidad.
Pasos para presentar una demanda por impago de facturas
Presentar una demanda impago facturas requiere seguir una serie de pasos legales para garantizar que el proceso se lleve a cabo correctamente. A continuación, te explicamos los pasos clave:
1. Redacción de la demanda
El primer paso es redactar la demanda impago facturas de manera clara y detallada. En ella, se deben explicar los hechos que dieron lugar a la deuda, la cantidad adeudada y las pruebas que se aportan para justificar la reclamación (facturas, contratos, etc.). Es fundamental contar con el asesoramiento de un abogado o una empresa especializada en recobro de deudas como DCL Gestión para asegurarse de que la demanda está correctamente redactada.
2. Presentación de la demanda
Una vez redactada, la demanda debe ser presentada ante el juzgado competente. Este puede ser el juzgado del domicilio del deudor o del lugar donde se llevó a cabo la prestación del servicio. Una vez presentada, el juzgado admitirá a trámite la demanda y notificará al deudor, quien tendrá un plazo para contestar.
3. Proceso judicial
Dependiendo del tipo de proceso (monitorio, verbal u ordinario), el proceso judicial se desarrollará de una forma u otra. En el caso del proceso monitorio, si el deudor no responde, se dictará una orden de pago. En el caso del juicio verbal u ordinario, se celebrará una vista donde ambas partes expondrán sus argumentos y el juez dictará una sentencia.
4. Ejecución de la sentencia
Si el juez falla a favor del demandante y el deudor sigue sin realizar el pago, se puede proceder a la ejecución de la sentencia. Este proceso permite embargar bienes del deudor hasta que se salde la deuda. En este punto, contar con una empresa de recobro de deudas como DCL Gestión puede facilitar el proceso, especialmente en la localización de bienes y ejecución de la sentencia.
Conclusión
Presentar una demanda impago facturas es un proceso que requiere conocimiento de los procedimientos legales y seguir una serie de pasos para garantizar el éxito de la reclamación. Actuar con rapidez y contar con el respaldo de profesionales expertos en recobro de deudas, como DCL Gestión, puede marcar la diferencia entre recuperar tu dinero o perderlo definitivamente.
En DCL Gestión, te ofrecemos la experiencia necesaria para gestionar de manera eficaz la reclamación de impagos y acompañarte en cada paso del proceso, desde la reclamación extrajudicial hasta la ejecución de sentencia. Si tienes facturas impagadas y necesitas ayuda para recuperar tu dinero, no dudes en ponerte en contacto con nosotros.